Hoy en día existen varios formas de explotación de peces:
Buques Pesqueros
Piscifactorías
Buques Pesqueros
Los buques pesqueros están equipados con redes de varios kilómetros de longitud, para llevar a cabo la pesca de arrastre, que consiste en arrastrar estas redes por el fondo marino, llevándose por delante a todos los animales que se cruzan en el recorrido, incluyendo rocas, vegetación, etc. Durante este proceso que puede durar horas, los peces sufren gran estrés y ansiedad al verse atrapados sin poder escapar. A medida que la red se va llenando, los peces comienzan a ser aplastados unos por otros.
Cuando llega el momento de recoger las redes, los peces sufren descompresión extrema que hace que sus globos oculares estallen, que su vejiga natatoria estalle y que los órganos internos queden gravemente dañados, incluso llegan a expulsar el estómago y el esófago por la boca. La descompresión es muy dolorosa, terrible.
La mayoría de los peces capturados en el mar, son asesinados en el barco, destripados cuando aún están vivos, incluso tras ser destripados pueden llegar a estar una hora vivos y conscientes, sufriendo y revolviéndose de dolor.
Piscifactorías
Las piscifactorías son fábricas de peces, cuyo objetivo es satisfacer una mayor demanda de peces para consumo humano, donde generalmente se crían salmones, anguilas y truchas dentro de tanques que se encuentran tanto en tierra firme dentro de naves industriales como en mar abierto.
En las naves en tierra, el crecimiento de los peces se altera mediante el control de la luz, dejando los tanques en completa oscuridad para posteriormente aplicar intensas luces que hagan creer a los peces que están en su estación de crecimiento.
La alimentación es siempre alta en proteínas con el único objetivo de hacerles ganar peso en el menor tiempo posible, para transcurridas varias semanas asesinarlos y venderlos.
En un mismo tanque pueden haber hasta 50.000 salmones, y mucho mas en el caso de las truchas. Estos les causa muchas enfermedades, principalmente afectando al páncreas. Suelen tener heridas y los parásitos acaban por comérselos vivos.
A pesar de que se les administran antibióticos, entre el 20 y el 50% mueren por enfermedades como el cáncer.
Al ser confinados en tanques, se convierten en agresivos, se hacen heridas, muestran deformidades e infecciones, desarrollan cataratas que acaban dañando sus corneas, quedándose ciegos y sangrando por los ojos.
En las piscifactorías los peces son sometidos a modificaciones genéticas para hacerles crecer mas y más rápido.
Muerte
Hay varios métodos aceptados para asesinar peces:
Sangrado sin aturdimiento
Se les cortan las agallas con un cuchillo y se les dejan desangrarse mientras se revuelven durante varios minutos (entre 4 y 7) a causa del intenso dolor.
Electrocución
Son electrocutados a través del agua, si la potencia no es suficiente, solo quedan paralizados pero conscientes cuando les van a matar. Este método les causa fracturas en la médula espinal y hemorragias.
Asfixia
Los peces son sacados fuera del agua y mueren asfixiados. Otra forma es meterles en tanques con hielo, prolongando su sufrimiento puesto que el hielo puede alargar el tiempo de consciencia. Está demostrado que peces que se asfixiaron sobre el hielo durante 15 minutos todavía podían sentir lo que les estaba sucediendo.
El golpe de gracia
Se les asesta un golpe en la cabeza, provocándole hemorragias cerebrales masivas que acaban en su muerte. Otra forma consiste en romperles la columna vertebral y las branquias con un fuerte movimiento en el que se le introduce un dedo dentro de su boca y se tira rápidamente hacia atrás. A los mas pequeños se les suele matar reventándolos contra el suelo.
Vida y muerte en las piscifactorías
Captura de Atunes
Como matan los peces en el barco
Hazte vegano: Los animales no somos comida. Todos los productos de origen animal suponen sufrimiento y muerte, la carne, el pescado, la leche, los huevos, la miel y sus derivados.